La esclavitud, lejos de ser un capítulo cerrado en la historia, es una atrocidad que afecta a más de 25 millones de personas en todo el mundo. Hoy, todos ellos sufren todo tipo de abusos que ni nos imaginamos. Hay diferentes tipos de esclavitud, desde el trabajo forzoso, hasta el abuso sexual y la prostitución. Guatemala no escapa a esta dolorosa realidad. Afortunadamente, gracias al coraje de ciudadanos comprometidos y al trabajo incansable de la Policía Nacional Civil de Guatemala, así como de organizaciones como Crime Stoppers Guatemala, se están dando pasos firmes para enfrentar este flagelo de nuestra sociedad
Decenas de personas son víctimas de trata entre fronteras y al interior. Mientras que los hombres y los niños tienden a ser objeto de trata con fines de trabajo forzado, las mujeres y las niñas tienden a serlo para obligarlas a realizar trabajo sexual.https://t.co/70cI7F3Pux
— UNFPA Guatemala (@UNFPAGuatemala) July 31, 2020
De enero a mayo de 2024, las autoridades de nuestro país han rescatado 30 menores de edad, de 1 a 17 años, de explotación laboral y sexual. Además, gracias a enormes esfuerzos han capturado a siete presuntos criminales acusados de tráfico de personas. Según las investigaciones, estos menores son originarios del interior del país, como Quiché o Totonicapán. Sus padres fueron engañados por una red de criminales que les prometieron empleos dignos a cambio de un trato justo, vivienda, comida y un salario superior al promedio.
La realidad era totalmente distinta. Según los hallazgos de los investigadores, estos menores eran forzados a trabajar en tortillerías, tiendas de barrio o ventas de madera. Un grupo de estos menores rescatados trabajaban largas jornadas de 5 de la madrugada a las 10 de la noche, los siete días de la semana. Dormían en situaciones deplorables, en los mismos locales en donde laboraban.
Esta gran victoria no habría sido posible sin el apoyo de los ciudadanos valientes que atrevieron a denunciar. Según Crime Stoppers Guatemala, el delito de trata de personas ha sido el cuarto más denunciado durante este 2024. De enero a la fecha, las autoridades han abierto 177 procesos de investigación.
Es alentador observar cómo los ciudadanos guatemaltecos están cada vez más conscientes de estas situaciones. Se evidencia un aumento en la vigilancia y la disposición a denunciar aquello que no está bien y que no es normal. Información del último informe sobre la trata de personas en Guatemala elaborado por el gobierno de Estados Unidos indica que, en 2023, la policía recibió un 40 por ciento más de llamadas relacionadas con trata de personas en comparación con el año anterior. Esto sugiere un crecimiento significativo en la conciencia y la acción ciudadana ante esta problemática. Ciertamente, considero que este aumento de conciencia tiene que ver con el lanzamiento de la película “Sonidos de libertad”. Estoy seguro que, a raíz de la película, más personas en nuestro país han abierto los ojos ante esta dura realidad.
Mantengámonos alertas. Recordemos que estos traficantes no tienen límites. Estas redes criminales hacen lo impensable para robarle la libertad a mujeres, hombres, jóvenes y niños, y transformar sus vidas y su cuerpo en objetos de lucro. Utilizan diversos métodos para operar, ganándose la confianza de las personas o de sus familias para luego traicionarlas con falsas promesas y engaños.
Nosotros, los ciudadanos, podemos hacer algo. Tenemos a nuestra disposición la valiosa plataforma de Crime Stoppers Guatemala para denunciar anónimamente de diferentes formas. Cualquier persona en cualquier parte de nuestro país, puede denunciar anónimamente a través del teléfono 1561 o a través del sitio web tupista.gt. Estas denuncias son insumos importantes que son debidamente analizados, para que las autoridades puedan avanzar en sus investigaciones y, eventualmente, lograr importantes capturas.
Erradicar la trata de personas y la esclavitud moderna requiere un esfuerzo colectivo y continuo. Cada denuncia, cada rescate y cada proceso judicial son pasos importantes hacia un futuro donde la dignidad y la libertad de cada individuo sean inquebrantables. Sigamos siendo vigilantes, solidarios y valientes en la lucha contra este flagelo que aún pervive en nuestra sociedad. Recordemos que, al levantar nuestra voz y actuar con determinación, estamos construyendo un mundo más justo y humano para todos.
