Todos perdemos la paciencia en el tráfico de nuestra ciudad. A pesar de los múltiples pasos de desnivel y los carriles reversibles, no parece haber mejoría alguna. Si bien el tráfico no es un indicador formal, este prueba que cada vez somos más. Pero es pura suposición. Si tuviéramos datos más certeros de cuántos habitantes existimos en la ciudad y en el país, quizás se podrían definir soluciones más acertadas al tráfico y a tantas otras necesidades. Sin embargo, estos datos no existen.

 

El último censo fue efectuado en 2002. Desde entonces nuestras autoridades han trabajado con base a proyecciones sobre los datos de hace 16 años. Pero usar estadísticas desfasadas es riesgoso porque no permite establecer planes y objetivos específicos. Afortunadamente, esto está a por cambiar. El próximo lunes el INE dará inicio al XII Censo Nacional de Población y VII de Vivienda.

 

El INE es “el órgano central de información y de distribución de datos estadísticos oficiales”. Está llamado a ser una entidad 100% técnica, confiable y transparente “para facilitar la correcta toma de decisiones”. El artículo 28 de su Ley Orgánica establece el censo como una de sus obligaciones. Sin embargo, no solo el INE tiene responsabilidad en este proceso. El artículo 2 del Acuerdo Gubernativo 109-2017 manda a todas las “personas individuales y jurídicas y privadas, nacionales y extranjeras, residentes o transeúntes en el territorio nacional” a colaborar con el INE en este esfuerzo. Quizás algunos se muestren reacios ante ello pero, sin nosotros, este censo no podrá ser una realidad. Entendamos que entre más nos alejamos de la fecha del censo, mayores son los errores de estimación de múltiples variables. Por ejemplo, se cree que la tasa de crecimiento de población ha reducido en los últimos años. Ello impacta en indicadores como el de cobertura educativa (el cual posiblemente esté siendo sub-reportado) o la tasa de homicidios per cápita (que podría ser más alta de lo que creemos).

 

Muchos se preguntarán, ¿por qué es importante saber cuántos guatemaltecos existen en nuestro país? Porque estas estadísticas sirven para tomar decisiones importantes. Este censo será la única fuente actualizada y fidedigna sobre nuestra situación demográfica. Con ello se podrá priorizar la inversión pública en la construcción de escuelas, centros de salud o carreteras, definir las áreas pobladas como municipio, aldea o caserío, establecer presupuesto para las municipalidades, identificar poblaciones vulnerables, entre muchísimas otras cosas. Lo más importante es que estos datos podrán ser utilizados para mejorar el diseño de políticas públicas y planes de desarrollo que tanto necesitamos.

 

Durante 25 días, un grupo de 14 mil censistas (debidamente identificados) visitarán todas las comunidades, municipios y departamentos de nuestro país, incluyendo nuestra propia casa. Su objetivo de obtener información real sobre la situación de nuestro país. No les neguemos el acceso, abrámosles nuestras puertas. Entendamos que, como ciudadanos, es nuestra obligación y responsabilidad colaborar con ellos en este proceso. Tengamos en cuenta que la información que nosotros les demos ayudará a transformar Guatemala.