Mi padre, Sergio Paiz Andrade, fallece en un viaje por el desarrollo de Guatemala, dejando así muchos logros pero también una labor inconclusa. Fue en su memoria, y con el propósito de acabar lo que había empezado, que formamos la Fundación Sergio Paiz Andrade (FunSEPA)

 Su espíritu emprendedor, curiosidad tecnológica, además de su amor a los niños, hizo “sencilla” la búsqueda del giro que le queríamos dar a FunSEPA. Fue así como, recordando su permanente actitud de educador, la fundación nació con el fin de incidir en la calidad educativa de Guatemala a través de la tecnología, utilizándola como herramienta facilitadora de aprendizaje.

Desde sus inicios, los esfuerzos de todo el equipo y las personas que se han ido sumando, han hecho posible la entrega de 15,264 computadoras y la capacitación del 60% de maestros del sistema público, beneficiando así a 992 escuelas y a 381,502 niños y niñas a lo largo de la república.

Este año inició un nuevo ciclo para FunSEPA. Tras diez años de trayecto, iniciamos el 2014 con un proyecto ambicioso y dinámico en el cual todos podemos formar parte. Se trata de los Embajadores de FunSEPA, o como quisimos llamarlos coloquialmente, nuestros “Héroes de la Educación” (#HDE), cuatro jóvenes que dentro de su propio ámbito y ayudándose de sus capacidades, están buscando lograr un impacto positivo en Guatemala. Se los presento.

Tiziana Billy, atleta nacional con medalla de oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de 2010; Alida Boer, empresaria y fundadora de la exitosa empresa “Maria’s Bag”; Ana Lucía Mazariegos presentadora de noticias en Canal Antigua y nombrada recientemente Global Shaper del Foro Económico Mundial para Guatemala; y PIVA, cantautor guatemalteco con varios éxitos sonando en las principales emisoras nacionales.

Al unirse a nuestro equipo, estos cuatro héroes, han adquirido el compromiso de ser las voces de cambio de nuestro sistema educativo. A través de la organización de distintas actividades y eventos no solo buscan seguir sumando logros para FunSEPA, sino servir como inspiración para que cada vez más personas se involucren en causas por mejorar nuestro país. Nuestros héroes comparten la visión que la Guatemala que todos soñamos la lograremos sumando voluntades.

Si bien en FunSEPA no tenemos la receta mágica para mejorar todo el sistema educativo, los esfuerzos de la fundación han logrado una incidencia concreta y cuantificable en su calidad. Nos guía la convicción que una educación de calidad es la base del desarrollo de largo plazo y de un mejor futuro para todos los guatemaltecos. El año pasado, en la inauguración de un laboratorio de computo en Tecpán, uno de los miembros del Consejo Comunitario de Desarrollo (COCODE) dijo: “nuestros padres nos heredaron un asadero y con él hemos salido adelante. Pero nosotros les estamos dejando a nuestros niños tecnología, algo con lo que van a lograr construir un futuro más prometedor”. Imagínense cuántos niños podrían expandir su universo de posibilidades si todos nos involucramos y apoyamos los esfuerzos de estos héroes, ¿quién se apunta?